lunes, 4 de diciembre de 2017

Historias fugaces

Pensé en el primer instante que mis labios se habían estado preparando para ti, para tu cuerpo.

Pensé también que eras demasiado guapo, demasiado listo, demasiado irreal.

Y quise negarme lo que el corazón gritaba, quise negar todo este sentimiento.  Ahora es de lo único de lo que me arrepiento de no haber vivido de forma intensa todo lo que sentía,  de no haber sido capaz de mostrarme realmente. De haber contenido mi emoción,  mi ilusión, mi cariño, todos mis sentimientos.

Y bueno, espero que seas feliz, que todo lo bueno que te mereces te ocurra. Que sepan cuidarte, que te mimen mucho, que me comprendan  cuando digo que he estado dos meses buscándote defectos... que lo único que habría mejorado esta historia es que hubieses sido un poco más para mí. Que sepan valorarte, en todo lo que vales.

Que cumplas tus sueños

Que seas infinitamente feliz

Que te quieran tanto como tu quieras.

Que tengas mucha suerte.

Y que GRACIAS por la felicidad que me has aportado, por todas las cosas positivas,  por darme lo mejor y por aparecer y desaparecer de la forma más bonita.

lunes, 29 de mayo de 2017

Ejercicio de paciencia

Te prometo que iba hacia la cama.... si me leyeses dirías que no son horas... pero de momento no me lees.

Te prometo que iba hacia la cama y al entrar en la habitación sonaba la música... se me habia olvidad que dejé el ordenador encendido...

Y ya que venía pensándote pues te plasmo... Sin llegarte mas allá de la cintura.



Siempre he sido impaciente, caprichosa, he querido que todo saliese tal y como yo quería, cuando yo quería...

Siempre he querido que me guiasen por necesitar relajar todo el autocontrol que llevo dentro... pensé que nadie podría ser tan constante como para calmarme.

Siempre he dicho que no existias...


Y de repente eres todas mis contradicciones

Un continuo ejercicio de paciencia, de marcar tú el ritmo, de que mi metrónomo interno deje de sonar... No es fácil, a veces me resuena el tic tac  interior y me pongo nerviosa, pienso en las mentiras, en las falsas esperanzas... en mi inevitable ilusión ante cada pedazo de vida que se me brinda...

¿Como negarme la ilusión que me mueve el alma?

Y de repente tus manías, tus medidas, tus maneras


Quiero pensar que me equivoco, que vivo de unir coincidencias y eso no será

Pero tengo este pálpito dentro... de imaginarte en cien años, de verte y mirarte, de saberte, de añorarte

Este insomnio que no me corresponde...
Este cosquilleo continuo

Y un nervio que no recuerdo cuando apareció...

Y te dudo mil veces


Y me enfado


y me enrabieto


Pero luego te pienso y bueno...


Mi ejercicio de paciencia

Ese que la vida me estaba pidiendo

Menudo reto me planteas

Yo, viviendo de la calma de esperar

Yo sin correr, sin mi ritmo caótico, sin mi tic-tac

El camino andando

Sin correr...

Y ahora sí, voy a intentar dormir.


lunes, 24 de abril de 2017

Las cosas que me pide el cuerpo

Quiero dormir 15 horas seguidas, hasta que duela.

Quiero un colacao fresquito, unas galletas específicas cuyo nombre no recuerdo y andar descalza por un suelo de mármol.

Quiero viajar

Un mojito con mi mejor amiga

Un abrazo de mi mejor amigo

Quiero dormir al lado de alguien

Quiero pasear

Quiero pisar la hierba

Quiero contar un secreto que me da miedo

Quiero que me besen en los labios suavito

Quiero un polvo de esos de bofetones

Quiero el mar de noche

Quiero ponerme mi vestido turquesa y mis sandalias de cuña.

Quiero que me crezca el pelo un palmo

Un vestido amarillo para mi graduación

Quiero bailar bajo la luna

Quiero comer patatas rellenas de feria con roquefort

Pero no quiero ir a la feria

Quiero un abrazo de los que curan el alma

Quiero unos días para mi

Quiero cuidarme

Quiero frenar despacio y volver a retomar cuando me sienta preparada

Quiero un futuro transparente

Quiero un amor lleno de vuelo

Quiero un batido de frutas

Un granizado

Zambullirme en el mar

Y quiero volver a escribir.

lunes, 20 de marzo de 2017

El camino trazado

El día que elegisteis vuestro camino, de alguna manera, elegisteis el mío. Trazasteis mis lineas, mis inicios, mi recorrido. Sin saber siquiera que yo algún día llegaría.
Vosotros que fuistes rectos, derechos, de paso militar, de misa diaria, de roles impuestos, de vidas trazadas. Rompisteis con ello, con la creencia, el camino, la música. Me trajisteis a mi al feminismo, me trajisteis bajo las voz de Nacha Guervara. Os quisisteis codo a codo. Reconstruisteis vuestros pasos a lo ancho y largo del mundo. Soltando poco a poco, cargas de vuestras mochilas. Para hacerme libre os rompísteis. Para hacerme feliz volvisteis a reconstruiros. Mis debates son los vuestros, mi corazón lleva la huella de vuestro camino trazado. 

El día que elegisteis vuestro camino, de alguna manera, elegisteis el mío. Elegisteis hacerme libre, poderosa, alta y bonita. 

El día que elegisteis vuestro camino, me empoderasteis, incluso más de lo que vosotros mismos habías logrado empoderaos. 


Limpiasteis mi camino, trazasteis con vuestros pasos mi ruta, tejisteis al daros la mano, mis alas. 

domingo, 5 de febrero de 2017

Mi niña de ojos azules

Mi niña de ojos azules, de sonrisa grande, de palabra tierna. Mi niña de ojos azules, de mirada profunda, de mente inquieta. Mi niña de ojos azules, de lágrima libre, de  alma buena...

Quisiera escribirte hoy, ahora que aún me comprendes. Que seas siempre libre, que seas auténtica, más que diferente. Que vueles alto, que es mejor estar en las nubes que caminar con el cielo, sobre tus hombros pesando.

Quisiera decirte hoy, ahora que aún me escuchas. Que no dejes de buscar hadas y que la vida merece la pena vivirla, que no todo es lucha.

Quisiera decirte hoy, ahora que aún me entiendes. Que mires las estrellas, que respires despacio y que la vida consiste más en estar que en tener. Que el verdadero regalo es, la persona que entrega el paquete.

Quisiera que recuerdes, que lo bonito de soplar velas, es la gente que te canta mientras lo haces.

Quisiera que cada noche, cuando te acuestes, pienses en si quieres ser manta raya o cucaracha.

Mi niña de ojos azules. Tú qué me entiendes cuando hablo de almas tú qué me entiendes cuando hablo de amor. 

Mi niña de ojos azules, ser guapa siempre es menos que ser valiente.

Mi niña de ojos azules, sé libre para bailar, para leer, para reírte y vestir y hacer volar tu falda.

Mi niña de ojos azules, las personas felices se manchan.

Mi niña de ojos azules, ahora que aún me entiendes solo una cosa más: sigue siempre el camino de aquello que sientes.

miércoles, 1 de febrero de 2017

Brisa, explotar, morir.

Camino despacio por el acantilado. Aquí me casé hace diez años con Él. Yo tenía 15 Él 32 y me amó cómo se ama a quien has buscado siempre. Tenía los labios finos,  la boca amplia, la barbilla cuadrada y el pelo castaño. Yo era rubia muy rubia casi blanco mi pelo cuando lo vi por primera vez, yo vestía de azul.

Me folló en cada polvo cómo si fuese el último, explotando dentro de mí, dándome su energía sabiendome más Suya que mía.

Y me lo quitaron una noche, Él se fue con la guerra, con el fuego, con las enemistades. Su muerte nunca mereció la pena.

Ya no exploté más, ya no volví a sentir la brisa entre los mechones rubios de mi pelo liso. Ya no volví a sentirme de mi tierra, de las islas que él defendía y por las que murió.

Ahora camino aquí en el acantilado, la brisa es viento, el mar de bravura y el precipicio no me detiene. Un paso más y me abalanzo al vacío, caigo. Voy a morir.

Mi amor, te encontraré allí donde vayamos.

jueves, 26 de enero de 2017

H

Era una chica pelirroja, le gustaba comer cerezas y correr por el bosque. Tenia un vestido blanco y los ojos verdes, los dientes grandes y los labios finos. Mil pecas y un lunar en el escote. Era alta... casi un metro setenta y trabajaba llenando los baños de agua caliente. Conocía las plantas que olìan mejor y las que más le gustaban a cada habitante de la casa. Se paseaba por los pasillos con las jarras de cerámica de 3 en 3. Una en la mano, una en la cintura, una en la cabeza... y acostumbró a caminar con la cabeza alta y a doblar la cintura cuando se quedaba quieta.

Era bonita, pero no de una belleza común... recogía su pelo algunas veces pero siempre escapaba algún mechón. 

Miraba por las noches las estrellas y follaba con ternura. Siempre tuvo un halo de misterio que se volvía en su contra. Las mujeres la envidiaban los hombres la temían y al ùnico que la amó la gente y la culpa no le dejaron amarla.

Tenia los pies planos y las uñas cuadradas. Las manos grandes y los dedos redondos, las uñas cortas. Las orejas más pequeñas del mundo casi circulares y los rizos de su madre.

Nunca conociò a su padre y nunca tuvo tiempo para echarlo de menos.

Tuvo durante un tiempo una hermana, pero eso importó poco en su vida... su hermana se fue.

El pecho redondo y pequeño, el vientre ovalado, las caderas anchas y las piernas largas. Los muslos se unían bajo el coño con el que cada noche follaba con ternura, mientras miraba las estrellas.

Su nombre empezaba por H